Scones de chocolate
Cuando vi esta receta de Scones de chocolate por Instagram me enamoré. Cuando fui a apuntar la receta había desaparecido, así que decidí buscar la receta original. La receta era de Buddy Valastro, el famoso «Rey de las tartas». No me costó mucho encontrarla, así que me puse manos a la obra.
Los scones son unos panecillos individuales, normalmente dulces, típicos de Escocia e Inglaterra. Se suelen consumir en desayunos y meriendas. Suelen llevar pasas, arándanos o, como en este caso, chocolate.
Estos scones de chocolate no son excesivamente dulces por lo que son un bocado perfecto a media mañana o entre horas. Yo era la primera vez que los hacía y debo decir que me han encantado. Tienen una textura entre bizcocho y galleta que los hace irresistibles.
RECETA DE SCONES DE CHOCOLATE
INGREDIENTES (para 8 scones):
- 160 gr de harina.
- 40 gr de azúcar.
- 45 gr de mantequilla fría.
- 1 yema de huevo.
- 70 gr de leche.
- 80 gr de pepitas de chocolate negro ( o chocolate para postres troceado)
- 1 cucharadita levadura química (3 gr).
- 1 cucharadita de extracto de vainilla.
- Una pizca de sal.
ELABORACIÓN:
-En un bol mezclamos la harina, el azúcar, la sal y la levadura. Añadir la mantequilla y con unas varillas mezclamos hasta que obtengamos una masa parecida a la arena mojada. No utilizaremos las manos porque de esta manera la mantequilla se calentaría y la masa quedaría demasiado blanda.
-En un bol aparte batimos la yema de huevo, la leche y la vainilla. Añadimos la mezcla de harina y el chocolate. Trabajamos con las varillas hasta integrar todos los ingredientes. No lo trabajaremos demasiado para que los scones no nos queden demasiado secos.
-Pasamos la masa a una superficie con un papel de hornear. Damos forma de disco con unos 2/3 cm de grosor. Con un cuchillo lo dividiremos en 8 cuñas. Separaremos las cuñas unos cuantos centímetros para que no se peguen al hornear (subirán un poco).
-Horneamos a 180º con calor arriba y abajo durante 20 minutos o hasta que al pincharlos con un palillo este salga limpio. Estarán blanditos pero se endurecerán al enfriarse.
-Dejamos enfriar sobre una rejilla.
¡No me digáis que no son tentadores!